Intensos aromas tostados
con una nota de bayas oscuras caracterizan a este sabroso Ristretto,
esta es la descripción que hace el
fabricante en caja ―traducido
del francés― , y si se acerca bastante al contenido, sobre todo en
los aromas tostados, además es un café muy agradable en lengua con
un toque muy aterciopelado. El café es 100% arábica, aunque sin
especificar orígenes y su intensidad 9 ―en un
ristretto
casi se podría esperar 10―. Para el
ristretto, con buena
lógica, en caja se recomienda una dosis de 25 ml ―casi ningún
otro fabricante hace esta recomendación tan razonable―, el
problema es que la gran mayoría de máquinas no lo tienen en sus
medidas, siendo las habituales las de 40 ml para todo tipo de
espresso y 110 para
lungo, por tanto hay que calcular a
ojo de buen cubero ―cafetero...― apagando la máquina. Buen café,
aunque no de los mejores de la gama.
La presentación, como
toda la gama, es muy elegante y cuidada, en una caja negra pequeña,
con dibujo de taza y cápsula, con detalles en distintos tonos de
grises, con abundante información, y que se abre y se cierra con
facilidad. Dentro hay sueltas 10 cápsulas troqueladas, de color
negro, con una distribución similar a la de una caja bombones.
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