Si
creíamos que con intensidad 12 ya estábamos pasando el límite,
aquí tenemos un café, según caja, de intensidad 13, y el
fabricante dice que Nº13
es un café excepcionalmente oscuro. Un café sofisticado que destapa
un toque amargo combinado con cacao, notas de robe y un rico y
prolongado retrogusto. La intensidad absoluta de un espresso.
Es un café para quien le guste un pelotazo de amargor en la boca,
estilo ristretto,
además con un amargor duradero en el que se notan esos matices de
cacao y, sobre todo, de maderas. Se echa de menos que no se diga el
tipo de café, intuyo que bastantes robusta,
ni los orígenes. Es un café muy interesante, pero como toda la
gama, algo caro.
La
presentación, siguiendo la línea clásica de la gama ―las últimas
novedades suelen traer colorido y este café vuelve a los dorados―
es elegante, jugando con negro, gris, dorado y el vaso de café
espumoso y humeante. En el interior hay 19 cápsulas marrón oscuro
envasadas en bolsa individual, con un diseño en negro y dorado que
recuerda directamente a la caja.
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