Otro
café con denominación de origen de la marca blanca de la
multinacional francesa, aunque el origen sea muy genérico porque
Asia puede ser desde Turquía hasta Filipinas... Y además de no
especificar de forma concreta el origen, poco más se dice en caja
que la intensidad, 7, y que exquisitas,
con notas fuertes y persistentes, las cápsulas de café Asia Auchan,
le llevarán, a lo largo de su degustación, a descubrir los países
productores de café,
es decir, exactamente lo mismo que en el Auchan Amérique du Sud...
lo que, honestamente, me parece una burla al consumidor. Las notas
fuertes y persistentes no lo son tanto, lo que sí hay es una
sensación acuosa en boca y un regusto a madera bastante interesante
y unas notas dulces persistentes al final. Es un café flojo que se
salva por barato.
La
caja es grande, el diseño poco llamativo, combinando negro y
violeta, con una taza de café vista desde arriba y algunos motivos
florales; la presencia de la marca es casi nula, reduciéndose a un
logotipo en tamaño pequeño y al nombre de la compañía aún más
pequeño. Dentro hay 10 cápsulas negras, cada una en un envase
individual de color negro con motivos florales y cañas de bambú en
violeta metálico.
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