Parece
que en la marca distribuida por los supermercados Lidl
gustan los lungo, éste es el tercero ―sin contar las ediciones
especiales― cuando es raro que nadie ofrezca más de uno, y, como
en los demás, la información de caja es poca, sólo se le dice al
lector que disfrute
de un café armónico y aromático. Exquisita y equilibrada mezcla de
árábica de las tierras altas,
es decir, salvo que es arábica ―en esto se insiste en otro lado
con un 100%
arábica―...
nada. Se especifica también la intensidad numérica, 5, que aparenta
un poco menos pues el café resulta flojo incluso como espresso. El
sabor no está nada mal, es afrutado y con algunas notas especiadas.
Aunque no es de lo mejor de la marca, buena relación calidad/precio.
La
caja es bonita, con diseño clásico y elegante; negra, lleva la
imagen de una taza transparente con un café con una espuma muy
sugerente ―similar a lo que se ve en nuestra taza― sobre un
fondo difuminado en distintos tonos de azul claro. En su interior hay
10 cápsulas de color azul celeste, envasadas de forma individual en
bolsas con un diseño elegante con cierta similitud a la caja.
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